Los AirPods de cuarta generación han dado mucho de qué hablar, y no es para menos. Estos nuevos auriculares de Apple ofrecen varias de las características que antes solo se encontraban en los AirPods Pro, pero a un precio más accesible. Claro, hay dos versiones para elegir, una más económica y otra un poco más cara, pero con la adición de cancelación de ruido y carga inalámbrica. Dicho esto, lo interesante es cómo Apple ha logrado incluir tantas funciones en estos pequeños dispositivos.
Una de las cosas más notables es su diseño compacto. Es tan pequeño que cuando lo llevas en el bolsillo, apenas te das cuenta de que está ahí. Aunque, como ya se ha dicho, hay ciertos momentos en los que puedes sentir su presencia, especialmente si sales a correr. Además, han incluido un altavoz en la carcasa, lo cual es útil cuando utilizas la función «Find My», porque, seamos honestos, con algo tan pequeño, es más probable que lo pierdas en algún momento.
Por otro lado, el modelo con cancelación de ruido activa es el que se lleva la atención. Aunque no llega al nivel de los AirPods Pro, lo hace bastante bien para ser un auricular con diseño abierto. Pero aquí está el truco: si lo que quieres es aprovechar al máximo el ecosistema de Apple, esta opción te va a encantar. No solo por la calidad del sonido, que es bastante decente, sino por lo bien que se integra con otros dispositivos de la marca. Y eso es algo que no se puede ignorar.
Al final del día, lo que queda claro es que los AirPods 4 no son perfectos, pero se acercan bastante a lo que se espera de unos auriculares de gama media de Apple. Si bien no son una revolución en el mundo del audio, su diseño y funciones los hacen una opción muy atractiva para quienes buscan comodidad y rendimiento a un precio más razonable.
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