Durante años hemos escuchado hablar del famoso iPhone plegable. Que si Apple lo tenía listo, que si aún estaba en pruebas, que si costaría un riñón… Pues bien, parece que por fin hay señales de que el proyecto avanza, y además con una sorpresa: podría salir más barato de lo que todos pensábamos.
El analista Ming-Chi Kuo, uno de los más fiables cuando se trata de Apple, ha contado que la compañía ha conseguido reducir el coste de la bisagra, esa parte clave que permite doblar el teléfono. Y no lo ha hecho usando materiales más baratos, sino optimizando cómo se fabrica. Vamos, lo típico en Apple: mejorar sin hacer ruido.
La bisagra, el pequeño gran secreto
Según los nuevos datos, fabricar la bisagra del iPhone plegable costará entre 70 y 80 dólares, cuando antes rondaba los 120. Puede parecer poco, pero dentro del mundo Apple eso es una auténtica victoria.
El cambio llega gracias a un acuerdo entre Foxconn (su socio de siempre) y una empresa taiwanesa llamada Shin Zu Shing, que se encargarán de la mayoría de la producción. Otro fabricante, Amphenol, completará el resto. Y más adelante, Luxshare podría sumarse para seguir reduciendo costes.
En resumen: Apple está moviendo fichas para asegurarse de que su plegable no dispare los gastos antes incluso de presentarlo.
Más barato… pero no para ti
Y aquí viene la pregunta del millón: ¿significa esto que el iPhone plegable será “barato”? Pues no exactamente.
Apple no suele trasladar estos ahorros al precio final. Lo más probable es que ese margen le sirva para invertir en mejorar otras partes del dispositivo o, directamente, para mantener sus beneficios intactos.
Aun así, el movimiento es importante. Habla de una Apple que ya está pensando en cómo fabricar en masa su teléfono plegable sin que le salga a precio de oro. Y eso, aunque suene a poco, es una gran señal de que el proyecto va en serio.
Lo que realmente está haciendo Apple
Más allá del dinero, lo interesante es cómo está jugando Apple esta partida. No solo diseña el producto, sino también su propia cadena de producción, cerrando acuerdos con empresas que garantizan control y calidad.
Es el método de siempre: no ser el primero, pero sí el que lo hace mejor. Prefieren tardar y hacerlo bien antes que correr y fallar.
El iPhone plegable ya no suena a experimento
Hasta hace poco todo esto del iPhone plegable parecía un sueño o una maqueta de laboratorio. Pero si Apple ya está negociando precios de componentes, eso quiere decir que el desarrollo está muy avanzado.
Los rumores apuntan a una posible producción en 2026, lo que encajaría con una presentación oficial en 2027. No falta tanto si lo piensas… y Apple ya tiene a medio mundo esperándolo.
En resumen
Apple no está corriendo detrás de nadie. Está preparando su jugada, como siempre.
Mientras otras marcas han quemado etapas con plegables frágiles o carísimos, Apple está puliendo cada detalle para que cuando lance el suyo, no sea solo un “iPhone que se dobla”, sino un producto que cambie las reglas del juego.
Y si la bisagra ya está lista… puede que el futuro del iPhone esté más cerca de doblarse de lo que imaginamos.
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